A años luz de la claudicación melancólica de nuestros intelectuales,que en su mayoría han abdicado de su responsabilidad moral de alzar la voz contra las falacias consolatorias, cuando no las mentiras, denuestras clases dirigentes, Noam Chomsky, que el pasado 7 de diciembre cumplió 94 años, sigue hablándonos desde la racionalidad y lalucidez, des- de un compromiso personal que ha puesto a prueba ennumerosas ocasiones y que le ha llevado a la convicción de que latenacidad y el coraje de hom- bres y mujeres nos llevará finalmente «a un mundo decente en el que la gente sienta que puede vivir sinvergüenza. Un mundo mejor».